Sostenibilidad en la producción de acero

La producción de acero es una de las industrias que más energía consume en el mundo. El proceso requiere una enorme cantidad de energía. La energía puede ser extraída tanto de combustibles fósiles como del coque, utilizando altos hornos, como de la electricidad en el caso de los hornos de arco eléctrico.

A pesar de que la producción de acero ha sido optimizada y en comparación con hace 50 años requiere un 61% menos de energía, sigue siendo la primera en la lista de consumo de energía en el mundo. Además, el 70% del acero producido en 2011 se produjo en altos hornos, lo que significa que durante la producción el subproducto en forma de CO2 se liberó en grandes cantidades.

De acuerdo con The World Counts, la cantidad de acero producida cada año sería suficiente para construir 1.800 torres Eiffel. Esas cifras pueden ser abrumadoras, pero el acero es necesario en casi todas las industrias del mundo. Empezando por las más demandantes como la automoción, la construcción, el transporte o la aviación y terminando con otras menos demandantes como la producción de instrumentos quirúrgicos o los implantes, los molinos de viento que nos dan energía verde o los electrodomésticos (sí, ¡también la nevera!).

No es tan malo como se podría pensar

Sí, para producir acero se necesita una gran cantidad de energía, pero ¿cuán reciclable es?

¡El acero es el material más reciclado de la tierra! El acero se usa, casi nunca se consume. El acero puede ser fácilmente refundido y reciclado. Además, también puede ser separado magnéticamente. La tasa global de reciclaje en 2014 fue del 86%. Comparando eso con el 41,9% de reciclaje de plástico según Eurostat, o incluso con el 65% de reciclaje de papel, la industria del acero está haciendo un trabajo excepcional en la implementación de la economía circular.

Así que, sí, la producción de acero es un proceso que consume energía pero también es un material altamente reciclable.

Las soluciones modernas para las altas emisiones de CO2

Se ha reconocido el problema de las altas emisiones de CO2. Hay varias maneras de que los productores de acero las reduzcan.

1. Usando el horno de arco eléctrico que reduce significativamente las emisiones de CO2 gracias al uso de la electricidad en lugar de los combustibles fósiles. La desventaja de este método es que se utiliza más comúnmente con la chatarra que con el mineral de hierro. La mayoría de los productos de acero permanecen en uso durante décadas. Eso significa que no hay suficiente chatarra en el mundo para satisfacer las necesidades usando sólo Horno de Arco Eléctrico.
2. Sistemas de Gestión Ambiental (EMS) - un EMS ayuda a las empresas a organizar y controlar el rendimiento ambiental. Según las estadísticas de sostenibilidad del Worldsteel, aproximadamente el 89% de todos los empleados de la industria siderúrgica han trabajado con el registro del sistema EMS en 2010.
3. Cambiando el uso de coque en los altos hornos por el uso de hidrógeno. Esta tecnología está disponible, pero hace que el acero sea mucho más caro y poco competitivo que el producido con el uso de coque. Más sobre este tema, otro nuestro otro artículo aquí.

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